HOMENAJE A UN VARÓN
Capitán de Corbeta Infante de Marina
RAFAEL ACOSTA AREVALO


Tomado, textualmente, de las redes sociales y autoría del Teniente de Navío MANUEL ANTONIO ORDAZ NÚÑEZ

Manuel Antonio Ordaz Núñez
30 de junio a las 19:02
A propósito del vil asesinato del CC RAFAEL ACOSTA AREVALO a manos de estos hijos de puta que una vez más enlutan a una familia Venezolana y en este caso en particular tratan de asesinar moralmente a un EXCELENTE Oficial que tuvo una trayectoria intachable en la que otrora fuese la Unidad de Operaciones Especiales más exigente y especializada de nuestra Fuerza Armada, he leído sentidas palabras de compañeros de armas, sobre todo de aquellos que compartieron vida profesional con él y varias veces se ha repetido una frase muy empleada en muchas unidades de Operaciones Especiales, Infantería de Marina, Paracaidistas o aquellas que son de alto riesgo, y esa frase es:

"LOS COMANDOS NUNCA MUEREN, SOLO VAN AL INFIERNO A REAGRUPARSE".

Sabiendo que tengo muchos superiores, compañeros y subalternos que van a leer esto y aludiendo a la frase antes mencionada, yo me pregunto: ¿será que hay que esperar a que estos malnacidos nos envíen a todos a reagruparnos en el infierno?, ¿tendremos que seguir viendo a compañeros de armas morir a manos de todos los aliados de esta banda de delincuentes, llámese a manos de la guerrilla, militares cubanos que controlan nuestra institución, narcotraficantes, etc.?, ¿dónde quedó el juramento de defender la patria de cualquier enemigo interno o externo?, ¿en qué momento se nos olvidó la Oración y el Decálogo de honor del Cadete Naval?, ¿hasta cuándo vamos a permitir la destrucción de nuestra Patria y nuestra Institución?. ¡Ya basta de tanta indolencia! Nada de esto estuviese sucediendo si tan solo nos fuésemos a las raíces de nuestra formación militar en las distintas escuelas, a esa época cuando siendo jóvenes cadetes en nuestras Alma Mater, Academia Militar de Venezuela, Escuela de Aviación Militar, EFOFAC y mi Amada Escuela Naval de Venezuela, nos preparábamos para la sagrada tarea de defender nuestra Patria y en donde se nos inculcaban verdaderos principios y valores del honor militar y amor patrio que nada tienen que ver y en nada se parecen a esta aberración que tenemos hoy como país y como institución.
Del CC RAFAEL ACOSTA AREVALO no tengo mucho que decir porque nunca compartimos en la vida profesional más, sin embargo, sé del enorme aprecio y buen concepto que de él tenían aquellos sargentos de la Unidad de Adiestramiento Fluvial en Amazonas, en donde aún después de años de retirado, se hablaba de su excelente calidad profesional y humana cuando estuvo al frente de aquella Unidad, y de hecho tuve el honor de conocerlo personalmente en una visita que alguna vez realizó a la Unidad y pude ser testigo de su condición de excelente superior y persona, ya que sin conocerme, charló conmigo por un buen rato e inclusive me dio valiosos consejos para mi carrera y para mi vida, así que solo me queda para él, pedirle al Divino Timonel que lo reciba en su santo seno y que provea de mucha fortaleza a sus familiares para afrontar tan lamentable pérdida y más en las nefastas circunstancias en las que ocurrió.
Finalizo este desahogo de rabia e indignación evocando el coro de la Marcha Épica de las Fuerzas Navales y diciéndoles:

"AL COMBATE VALIENTES MARINOS,
NADA IMPORTA MORIR EN LA MAR,
SI SE SALVA EL HONOR MILITAR,
Y LA PATRIA Y SU NOBLE DESTINO".!

¡Honor a nuestros caídos!”